La Fundación Huete Futuro es de todos y es para todos

Desde los primeros pasos de la Fundación Huete Futuro, sus impulsores, primero, y el patronato de la Fundación después, han tenido como objetivo crear e impulsar una entidad abierta. Abierta, primero, a todos los optenses, sin ninguna clase de distinciones, tanto si viven en Huete como si están fuera y, también, a todos aquellos que por diversas circunstancias puedan estar relacionados. Abierta a otras personas, entidades e instituciones, tanto públicas como privadas, que es lo mismo que decir bien relacionada, que sepan entender nuestros fines y objetivos y tiendan puentes que faciliten la progresión y financiación de nuestros proyectos y actividades. Pero además, la Fundación Huete Futuro debe ser una entidad viva y dinámica, innovadora, que se distinga por la calidad en las actividades que organiza y de los proyectos que elabora y promueve para la recuperación y restauración del patrimonio de Huete; todo ello creará una imagen de Huete y de la Fundación que será, de cara hacia fuera, sinónimo de garantía en la gestión.

Esas dos vertientes de las que se hablaba antes se traducen y concretan en los objetivos que la Fundación se propone con sus actividades, todas ellas están destinadas a cubrir uno u otro enfoque, o ambos a la vez. Si en alguna ocasión algún optense entiende que una actividad concreta no va con él, es muy posible que los destinatarios puedan ser otros, pero eso no es óbice para seguir apoyando la Fundación. Una entidad que quiere ser abierta no puede ser endogámica, sería una contradicción y tendría los días contados, por otra parte teniendo en cuenta los escasos recursos de que dispone el municipio como no busquemos fuentes de financiación fuera de nuestro horizonte más inmediato Huete no tendrá ningún futuro y a la experiencia nos remitimos.

De manera reiterada la Fundación ha estado llamando a todos, y lo seguirá haciendo, a incorporase como Amigo a la Fundación Huete Futuro, las puertas están permanentemente abiertas y, nunca a nadie se le ha impedido franquearlas. Los Amigos de la Fundación son su fuerza y sin ellos la Fundación no es nada. La Fundación Huete Futuro no ha nacido de las manos de un mecenas, público o privado, que aportando un patrimonio fundacional disponga sobre su administración y sobre el destino de sus rentas, no; la Fundación Huete Futuro nació como una entidad destinada a tener una amplia base social que la sostuviera y en la que cada uno, cada Amigo, aportara lo que pudiera aportar en beneficio del fin de la Fundación, que reiteradamente resumimos en “Recuperar el pasado de Huete, para construir su futuro”. Una amplia base social permitirá a la Fundación Huete Futuro, pero sobre todo permitirá a Huete que es lo que importa, presentarse ante las posibles instituciones financiadoras de proyectos con una imagen de unidad, apoyo y consenso con respecto a sus fines y proyectos que sin lugar a dudas facilitará, aunque no sin dificultades en los tiempos que corren, poderlos resolver satisfactoriamente.

Hoy, desde las páginas de este boletín, animamos a todos aquellos optenses de nacimiento o adopción que aún no son Amigos de la Fundación Huete Futuro a que se hagan Amigos, y a que no se queden en la letra pequeña del día a día, que no hagan acepción de personas y, sin embargo, que se abran a nuevos horizontes, más audaces e innovadores.

El futuro de Huete está en nuestras manos si trabajamos por él con constancia, quizás con tozudez, y unidos, pero con audacia. Los que así quieran trabajar por Huete encontrarán en esa encrucijada a la Fundación Huete Futuro y ahí os esperamos.